Que este año en Nicaragua más de 63 mujeres hayan sido asesinadas por hombres
cercanos a su entorno familiar no es coincidencia. Y esta no es la única forma
de violencia que se practica hacia las mujeres, cualquier tipo de maltrato
físico, psicológico como económico, es violencia. Los celos, presionar o
piropear a una mujer refiriéndose a ella como si de un objeto se tratara,
también es violencia. Cualquier forma de discriminación hacia una mujer es
violencia, y se llama machismo. Según la ONU, una de cada tres mujeres en el mundo ha sufrido algún tipo de violencia en su vida.
Algo
está pasando y pasa desde hace mucho, parece ser… desde que el mundo es mundo
se dice en ocasiones... Queriendo así justificar muchas veces el orden (o
desorden) conocido de las cosas. Transmitiéndonos que no se pueden cambiar y tan
solo nos queda resignarnos a que la realidad siga siendo siempre así… No, la
hemos heredado, la hacemos y seguimos permitiendo que siga siendo así, simplemente cuando no hacemos nada por cambiarla. Para transformar la realidad, tan
solo hay que comenzar… desde el día a día, lo pequeño y a veces insignificante,
pero que siempre depende de cada uno/a de nosotros/as. No desde la teoría o los
discursos, sino desde la práctica cotidiana. Lo cual siempre exige el cambio
primero en nosotros/as mismos/as. Tampoco podemos esperar siempre que vengan
otros/as a cambiarla, porque será entonces cuando difícilmente cambie. Y si lo
hace, quizá no será el cambio esperado por ti o por mi. Quien dice no me meto no me comprometo, no
se puede llamar ni buen cristiano, ni buen ciudadano. (Mons. Romero). Así
parece lamentablemente que pasa con todo. Pero… ¿con todo?
La
campaña con motivo de 8º aniversario de la Red, apoyada por Save the Children y
FED/HIVOS, se está implementando por 10 municipios de Nicaragua. Difundida
principalmente por las organizaciones que son miembros de REDMAS, como es el
Proyecto Samaritanas de las CEB. Teniendo una duración de 3 meses y
pretendiendo llegar a unos 10.000 hombres con edades entre los 20 y 35 años.
Por medio de diferentes actividades y medios: jornadas de reflexión, talleres
en barrios y comunidades, también con la policía nacional, programas y viñetas
de radio, spot publicitarios, canciones, redes sociales, camisetas, pegatinas…
Comenzó
el 17 de octubre, donde todos los hombres de la REDMAS que pudieron se
concentraron en diferentes puntos públicos de Managua, portando pancartas en
las que hacían referencia a cambiar los golpes, los piropos, los celos y todo
tipo de presiones… por otras formas más respetuosas y positivas en relación a
las mujeres. Recuerdo cómo algunos hombres nos increpaban e insultaban porque
sentían cuestionado su machismo, en cambio otros como otras tantas mujeres
aplaudían la iniciativa. Después se tuvo el lanzamiento de la campaña en un
hotel con todos los medios de comunicación presentes. Allí mismo Deborah
Gradison, procuradora de los Derechos Humanos de las Mujeres en Nicaragua,
dijo: Entre menos hombres asuman su
responsabilidad, mayor es la carga para las mujeres en la lucha por erradicar
la violencia.
El
lunes pasado, en “la reunión de los lunes” como decimos en las CEB de Managua,
se tuvo en el Proyecto Samaritanas y aprovechamos para presentar la campaña y
sobre todo para rezar, reflexionar y comprometernos una vez más juntos/as,en
esta importante cuestión que es de todos/as. Por medio de varias actividades
vivenciales propias de la pedagogía de la educación popular, tan presente en
nuestros espacios. Terminando con una alegre piñata cargada de regalos y
mensajes positivos en contra de la violencia. Como decía Pablo Neruda: Podrán cortar las flores, pero no podrán detener la primavera.
El problema del machismo no está superado en ninguna parte. Te mando un abrazo muy grande. ANIMO con esa comunidad. Abrazos. Gerardo
ResponderEliminarOtro abrazo de ánimo Gerardo.
EliminarGracias Pablo por tu trabajo y tu testimonio. Por tu compromiso, por tu ejemplo, por tus palabras ... por compartir tu vida....
ResponderEliminarAntonio Crespo
Gracias a ti, Antonio, por compartirlo juntos. Un fuerte abrazo
Eliminar